Abstract
La economía peruana durante los últimos cuarenta años se ha caracterizado por ciclos sucesivos de arranque y freno. En los últimos años estos ciclos no sólo se han vuelto más frecuentes, sino más agudos, hasta llegar a recesiones que han significado tanto caídas del PNI mayores al 10% anual, como tasas de inflación que bordearon la hiperinflación.